Que las arpas de las musas me lleven hasta ti. Que el sonido del mar me eleve hasta los cielos donde tú reinas.
Que el frío aire, que hiela mi cara, me arrastre hasta el fuego de tú boca.
Que mi corazón, herido, se recueste en tu seno. Seguro y amado.
No dejes que los demonios arrastren mi alma hasta el Hades. Sujeta mi trémula mano, guarécela de aquello que me aqueja.
Se mi escudo y mi coraza.
Se mi escondite y mi refugió.
Solo necesito descansar de este hastiado mundo.
Solo necesito, cerrar mis ojos durante un tiempo.
Recuperar mis fuerzas, sobre llevar estos males que me aturden.
Pero te prometo resurgir, elevarme hasta lo más alto, sobrevolar agarrados por el cosmos de la dicha.
Solo necesito dormir un poco,
acurrucado junto a ti.
Para que al despertar.
Mi mundo sea luz.
Tú luz.
Comentarios
Publicar un comentario